Una de las recomendaciones más repetidas en el ambiente de la alimentación y gastronomía es “adquirir alimentos frescos”. Sin embargo, la estructura de venta actual hace que los productos tomen tiempo en llegar hasta la mesa del consumidor, siendo más costosos y perdiendo nutrientes y propiedades del producto.
En contraposición, la tendencia a elaborar sus propios alimentos va creciendo, brindando la oportunidad de conseguir alimentos frescos a bajo precio. La agricultura urbana es una de las técnicas que ha crecido recientemente y ha favorecido a personas con dificultades económicas y sociales a unirse en pro de un objetivo común.
Esta tendencia se ha vuelto tan fuerte que en algunas ciudades se han dispuesto zonas verdes del espacio público para la elaboración y mantenimiento de jardines comunitarios. En la ciudad de Montreal, se han establecido varios de ellos, un lugar en donde la comunidad se une para embellecer y producir alimentos. Allí, una organización se encarga de la gestión del espacio y las familias que participan se hacen cargo de los cultivos y el mantenimiento de la zona. Al mismo tiempo, la comunidad se va integrando y socializando alrededor de la producción de alimentos y el embellecimiento de sus zonas verdes.
Cabe destacar que los alimentos resultantes son los más frescos que se pueden conseguir, favoreciendo la seguridad alimentaria y la salud de las personas. Además permite a las comunidades crear o mantener lazos sociales en pro de una buena convivencia. Es una actividad que enseña el valor de la responsabilidad por su ciudad y abre caminos a una cultura ciudadana para el aseo y trabajo colectivo. Son muchos beneficios en una sola estrategia.
Reflexión
¿Considera que esta estrategia podría ser útil en lugares cercanos a su lugar de vivienda?