El domingo asistí a una clase de aeróbicos en lo que noté algo particular… lo que me inspiró a escribir este texto.
Esa clase fue al aire libre, al frente de un centro comercial. Asistieron cerca de 250 personas de todas las edades. La actividad fue excelente.
Al lado de la tarima donde se encontraban los instructores, habían unas carpas de los patrocinadores. Uno de ellos estaba realizando valoración del peso corporal gratis a los participantes. Por supuesto, las personas empezaron a acudir al sitio para saber cuál era y cómo se encontraba su peso.
Durante las dos horas de la actividad, ese puesto estuvo ocupado todo el tiempo atendiendo la solicitud de las personas que hacían fila pacientemente.
Realmente, felicito a las personas que lo hicieron. Demuestran estar preocupados por su peso corporal, elemento que hace parte de su salud.
Sin embargo, dudo mucho que entiendan que es lo que sucede para llegar a un peso saludable, ellos y ellas (muy probablemente) se habrán conformado con una frase como: “Su peso está bien para su estatura, la felicito” o “su peso es inadecuado” y algunas recomendaciones.
Por ello quiero explicar brevemente que significa el peso saludable.
El peso del cuerpo (ese hermoso “numerito” que aparece en la balanza y que a veces es muy preocupante), es tan solo el resumen de lo que eres.
El peso corporal, es la unión de las diferentes “partes” que tiene el cuerpo. Existen varias clasificaciones para estas partes, yo prefiero usar la división en cuatro componentes: peso muscular, peso graso, peso óseo y peso visceral. Cada uno aporta un peso distinto de acuerdo a la persona.
De estos cuatro componentes, lo importante es que el peso graso no sea demasiado elevado cuando se compara contra el peso total del cuerpo.
Este tema es un poco complejo pero lo que quiero que entiendan, lo voy a explicar a través de un ejemplo.
Imaginémonos lo siguiente: Existen dos hombres con la misma altura y peso, ambos pesan 90kg y miden 185cm. Su IMC (Ínice de Masa Corporal: Relación entre el peso y la estatura) es de 26.3, se interpreta como sobrepeso para ambos sujetos.
La diferencia que existe entre uno y otro está en la actividad física que realizan. Uno de los dos es una persona sedentaria, que no hace mucha actividad física. La otra persona hace actividad física y levanta pesas. Ya se podrán dar una imagen de ese ejemplo.
Al primer sujeto se le puede decir que tiene sobrepeso probablemente a expensas de grasa, pero el peso del segundo se toma como normal, considerando que pesa más por culpa del músculo que tiene.
El anterior ejemplo explica que el peso es solo un pequeño dato de toda la información que se requiere para un peso saludable y que hace falta ver como se distribuyen los pesos de esos cuatro componentes en la persona. Así se puede saber realmente qué nos quiere decir ese numerito que nos muestra la balanza.
Por ello, cuando se tomen el peso, consideren cuáles son sus hábitos de vida y de alimentación. Si sienten que son sedentarios o que su alimentación no es importante, aunque sean delgados no es un peso saludable. Es un peso que solo resulta de sus actos. El peso saludable se genera del bienestar que tienes con tu cuerpo, de saber que tus actividades diarias promueven de alguna forma tu salud.
Desde mi punto de vista, si ustedes tienen hábitos de vida saludable, van a llevar a un cuerpo saludable y a un peso saludable sin necesidad de hacer un esfuerzo “extra”, en donde dormir bien, alimentarse bien y hacer actividad física y ejercicio, son parte de las actividades diarias.
Por ello, tengan en cuenta el peso que les da la báscula, pero no le den tanta importancia. Yo les recomiendo que más que el peso de la báscula, tengan como objetivo tener un peso saludable y hagan lo posible por conseguirlo y mantenerlo.